Armado con sus notas medias y una cartera de bocetos de mujeres desnudas, Peter se matriculó en la escuela de arte y descubrió pasteles secos por primera vez. Supo que había dado con algo cuando, en su último año, algunos de los profesores le pidieron que comprara sus cuadros, y así comenzó un viaje creativo que le ha llevado a trabajar como ilustrador, creativo publicitario premiado y artista del pastel. Peter está obsesionado con la vitalidad y la inmediatez de pasteles secos. Citando a esa gran banda punk australiana, Amyl and the Sniffers, "Good energy and bad energy, I've got plenty of energy, it's my currency".
Peter reside actualmente en la selva neozelandesa y muchas de sus obras se inspiran en la extraña y diversa gama de aves autóctonas que viven allí.